La prolactina es una hormona producida por la glándula pituitaria anterior en el cerebro. Su función principal es estimular la producción de leche durante la lactancia materna. Sin embargo, la prolactina también puede tener un impacto en la fertilidad tanto en hombres como en mujeres.
Altos niveles de prolactina, hiperprolactinemia
En las mujeres, niveles altos de prolactina en la sangre, conocido como hiperprolactinemia, pueden interferir con la ovulación y la menstruación, lo que puede dificultar la concepción. La hiperprolactinemia en mujeres puede ser causada por diversas razones, como tumores benignos en la glándula pituitaria (adenomas prolactinomas), medicamentos que aumentan la producción de prolactina, enfermedades de la glándula tiroides o ciertas condiciones médicas.
En los hombres, niveles elevados de prolactina también pueden tener un impacto negativo en la fertilidad. La hiperprolactinemia en los hombres puede causar disminución de la producción de esperma y disfunción eréctil. Las causas comunes de hiperprolactinemia en los hombres incluyen adenomas prolactinomas y el uso de ciertos medicamentos.
Si se sospecha de hiperprolactinemia y se tiene dificultades para concebir, es importante consultar a un médico especialista en fertilidad o endocrinología reproductiva. El médico puede pautar pruebas de sangre para medir los niveles de prolactina y determinar la causa subyacente. Dependiendo de la causa, el tratamiento puede implicar la corrección de una enfermedad subyacente, cambios en la medicación, terapia con medicamentos para reducir los niveles de prolactina o, en casos más graves, cirugía para extirpar un tumor en la glándula pituitaria.
Es importante tener en cuenta que la infertilidad puede tener múltiples causas, y la hiperprolactinemia es solo una de ellas. Es fundamental buscar atención médica especializada para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado.
Valores normales y alterados de la hormona prolactina
Los niveles normales de prolactina en sangre pueden variar ligeramente según el laboratorio que realice las pruebas, pero, en general, se considera que los valores normales de prolactina en mujeres que no están embarazadas suelen estar en el rango de aproximadamente 2 a 29 ng/mL (nanogramos por mililitro).
Cuando una mujer está tratando de concebir y se encuentran niveles de prolactina elevados por encima de los valores normales, esto puede afectar la fertilidad. Los niveles elevados de prolactina pueden interferir con la ovulación y, en consecuencia, dificultar el embarazo.
En general, se considera que los niveles de prolactina que superan los 30 ng/mL son elevados y pueden requerir evaluación y tratamiento, especialmente si una mujer está experimentando dificultades para concebir. Sin embargo, es importante recordar que los valores específicos de referencia pueden variar según el laboratorio y las circunstancias individuales de la paciente.
¿Cómo se cura la hiperprolactinemia?
El tratamiento de la hiperprolactinemia, es decir, niveles elevados de prolactina en la sangre, depende de la causa subyacente. Aquí te menciono algunas de las opciones de tratamiento más comunes:
- Cambios en el estilo de vida: Si la hiperprolactinemia es leve y se debe a factores como el estrés, el ejercicio excesivo o la falta de sueño, realizar cambios en el estilo de vida puede ayudar a normalizar los niveles de prolactina. Esto puede incluir reducir el estrés, mejorar la calidad del sueño y moderar la actividad física intensa.
- Modificaciones en la medicación: Si la hiperprolactinemia es causada por el uso de ciertos medicamentos, el médico puede considerar ajustar la dosis o cambiar a un medicamento alternativo que no tenga este efecto secundario.
- Tratamiento farmacológico: La mayoría de las veces, el tratamiento principal para la hiperprolactinemia implica el uso de medicamentos llamados agonistas de la dopamina. Estos medicamentos actúan sobre el sistema nervioso central para reducir la producción de prolactina. Ejemplos de agonistas de la dopamina incluyen la bromocriptina y la cabergolina. El tratamiento con estos medicamentos suele ser efectivo y puede ayudar a normalizar los niveles de prolactina.
- Cirugía: En casos raros en los que la hiperprolactinemia es causada por un tumor en la glándula pituitaria (adenoma prolactinoma) que no responde bien a los medicamentos, puede ser necesario realizar una cirugía para extirpar el tumor. Esta cirugía se llama adenomectomía transesfenoidal y se realiza a través de la nariz y el seno esfenoidal.
- Radioterapia: En casos extremadamente raros en los que los tumores prolactinomas son resistentes tanto a los medicamentos como a la cirugía, la radioterapia puede ser una opción de tratamiento, aunque se considera menos común.
El tratamiento específico dependerá de la causa de la hiperprolactinemia, la gravedad de los síntomas y la respuesta individual al tratamiento. Es importante que cualquier persona con hiperprolactinemia sea evaluada y tratada por un especialista, ya que estos profesionales pueden diseñar un plan de tratamiento adecuado y realizar un seguimiento para garantizar que los niveles de prolactina se normalicen y que la salud reproductiva se restaure si es necesario.